lunes, 3 de octubre de 2011

El baúl del monje

Ciertos fenómenos que se escapan a la física, están desde mi apreciación suficientemente demostrados, es el caso de los poltergeist. Existen energías más allá de este mundo que interactúan con el lado de acá. Para el mejor conocimiento de estos fenómenos, o por lo menos para definirlos desde el punto de vista de la ciencia zacarina, escribo este artículo, que progresa en el aumento de una apreciación más nítida del mundo, de nosotros mismos, y de Dios.
Fenómenos como movimientos de objetos motu proprio, o las materializaciones de fantasmas, provienen todos de la metaestructura, y como queda dicho la metaestructura es Dios, por tanto tales fenómenos son materializaciones fidedignas de la presencia de Dios. Pero claro se dirá que tales fenómenos ocurren al azar, y que débilmente tienen una relación con el lugar o las personas que allí han habitado. Se ha definido la metaestructura mediante el azar, el término de incertidumbre, y la continuidad  estructural de la materia. Por eso hay relación histórica en los fenómenos, y por eso éstos ocurren aleatoriamente sin verse que exista una voluntad clara detrás. En todo caso la voluntad de Dios es inescrutable y se manifiesta mediante las leyes de la metaestructura,  por ello que surja al azar, de manera esporádica.
Dios es increado pero es creador, en los poltergeist se manifiestan aportes, objetos que surgen de la nada, Dios puede crear de la nada, Dios ha creado al mundo de la nada y al hombre de la nada. Y cuando hablo de nada entiéndase la metaestructura en embrión. Pero Dios ha creado la vida de la nada no de forma inmediata, el proceder de Dios es siempre mediato, Dios es omnipotente pero obra sin inmediatez, la creación de la vida la hemos denominado evolución de las especies, la evolución es un proceso regido como todo por la metaestructura, hay azar y hay continuidad de los genes, nada define mejor la metaestructura que el proceso evolutivo. Por otra parte Dios está en todas partes y en ninguna, como la metaestructura, de ahí que Dios sea ubicuo.
Un fenómeno sobrenatural es la resultante de la interacción entre la metaestructura  individual, que no es más que lo que denominamos alma y que sin duda es una fracción de  la metaestructura universal, y está última. Para que se produzca el fenómeno deben darse unas condiciones muy especiales, por ejemplo en el Baúl del monje se detectaba un campo magnético casi cero, esto indica como dice la física estructural que no hay materia ninguna, ni siquiera partículas magnéticas. La ausencia de partículas nos indica presencia mayor de metaestructura. En algunos  lugares y en algunos momentos la metaestructura universal es más densa, debido al azar por una parte y por otra a la continuidad, si allí han existido almas que han dejado su huella, más fácil será la manifestación.  Por qué los fenómenos sobrenaturales son tan escasos?  Porque el peso de la materia es enormes, vivimos en estructuras casis perfectas, y es este casi el que posibilita a veces lo sobrenatural. Personalmente en toda mi vida sólo he contemplado un fenómeno sobrenatural evidente, una teleplastia, hija del azar, y hasta cabe la posibilidad de que haya sido una broma pesada.
Las manifestaciones sobrenaturales no son benignas ni malignas, pues Dios no es Bueno ni Malo, está por encima de todo eso. Ya dijimos que estos fenómenos son una interacción entre la metaestructura individual y la universal, la maldad de la manifestación hay que achacársela al alma. Pues los demonios no son más que excrecencias perversas del alma individual. Dios existe con y sin el hombre, el Diablo solo con el hombre.

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